Archivo para la categoría Consejos

Tiempos, urgencias y seguros

Paso del tiempo

Qué importante es el tiempo para todos nosotros, lo mires por dónde lo mires. Además resulta algo totalmente equitativo ya que tanto ti como para mi, y para el resto de lectores, es el mismo y la diferencia está en lo que hagamos o dejemos de hacer con él. Si bien es cierto que algunas personas son capaces de aprovecharlo mejor que otras, en todos los casos se trata de un factor básico que determina si los resultados obtenidos en las distintas actividades que has realizado, profesionales o personales, son los deseados o por contra todo ha resultado una auténtica chapuza. Pues igual pasa en los seguros.

La Ley en materia de seguros recoge unos plazos concretos para realizar determinadas actuaciones de las que ya hablé anteriormente. Es importante que los tengas presente ya que generalmente no se conocen o se tienden a confundir con otros plazos, y recuerda que si bien es posible que en alguna de tus pólizas el plazo pueda ser más favorable para ti, nunca pondrán imponerte un plazo que te limite más de lo que ya establece la Ley.

Por otro lado están los tiempos de respuesta de aseguradoras y mediadores que no están recogidos en la norma, y que tan importantes son para que el seguro se muestre realmente útil cuando lo necesitas. ¿Qué que te sirve tener un seguro si la aseguradora demora artificialmente el pago de la indemnización? ¿Para qué te sirve un mediador si te responde tarde o nunca? O todo lo contrario, ¿cómo te quedas de satisfecho cuando mucho antes de lo que esperabas tienes resulto tu problema y puedes seguir con tus cosas? Leer el resto de esta entrada »

, , , ,

Deja un comentario

¿Quién compara a los comparadores de seguros?

Comparativa

Comparar es un acto natural del ser humano y algo que haces constantemente en tu vida diaria de forma consciente o inconsciente. Comparas lo que tienes, tus experiencias vividas, tu estado físico e intelectual, etc… con elementos de tu entorno, con tus propias circunstancias o contigo mismo. Al hacerlo estás tratando de aprender más sobre eso que comparas, necesitas más información para apreciarlo mejor y darle el valor relativo que tiene para ti, además de activar un mecanismo de protección para evitar el temor a equivocarte. Procuras reducir al máximo esa posibilidad y como es imposible saber de todo con el nivel de detalle que tu cerebro desearía, comparas y al final usando un factor emocional (la intuición, otra gran herramienta psicológica) te decantas por un producto u otro (excluyendo la comparación social de las personas, porque esta sí tiene factores psicológicos muy distintos de la comparaciones de bienes, servicios, experiencias o sensaciones).

Ahora mismo yo estoy comparando smartphones por si el que tengo no supera una ducha que le di viajando en moto. Y lo hago porque pretendo no equivocarme y hacer una buena elección en el próximo móvil que compre en función de mis necesidades y posibilidades económicas. Pero este proceso ¿es similar para los comparadores de seguros? Definitivamente no. Cuando comparo distintos móviles lo primero que veo son sus características técnicas al detalle, una por una con la descripción completa de sus funciones como pantalla, procesador, sistema operativo, conectividad, etc. Acto seguido busco análisis en prensa especializada y de contrastada reputación para conocer aspectos difícilmente plasmables en una tabla de valores como comodidad de uso, duración de batería, servicio técnico, etc. Y por último leo comentarios de otros usuarios que ya han disfrutado de dicho móvil para conocer sus experiencias, por si alguna me afecta en gran medida y deba tenerla en consideración. Leer el resto de esta entrada »

, , , ,

9 comentarios